Estratificado, laminado, polilaminado… Si te suenas estos términos, eres de los ‘míos’ y estás pensando en renovar la cocina.

No es una decisión fácil. Requiera obras, cambios en la fontanería, carpintería, electricidad… Y, por tanto, un presupuesto elevado. Además, elegir materiales para la cocina consume tiempo y energía.

Hasta que no nos ponemos a ello, no nos damos cuenta de la gran variedad que existe. Por este motivo, hoy vamos a ayudarte con algunos consejos.

Encimeras

Al elegir materiales para la cocina empezaremos teniendo en cuenta la encimera.
Uno de los materiales estrella es el granito por su dureza y longevidad. Aunque ha dejado paso a otras opciones, como el cuarzo (Silestone) y el porcelánico (Dekton). Merece la pena dedicar gran parte del presupuesto a una encimera de este tipo ya que es una inversión para toda la vida: no pasa de moda, resiste golpes y calor y se mantiene limpio y desinfectado fácilmente. Os recomendamos que te pongas en manos de profesionales con experiencia. Para ampliar información visita la web de esta empresa especialista en este tipo de materiales https://www.alvarezylastras.com/.

encimera granito

La encimera de madera, por su parte, aporta a la cocina un aire especial. Pero es más inestable a la humedad y menos resistente a golpes y cortes.

Finalmente, los que quieran dar a su cocina un aire industrial pueden colocar una encimera de acero inoxidable. Es impermeable y con una gran resistencia a los golpes y altas temperaturas. Aunque es aconsejable elegir un acabado no muy pulido, para disimular los inevitables arañazos.

Bases del mueble

Tómate el tiempo que necesites para elegir materiales para la cocina. Compara los interiores, puertas, cajones y herrajes, en función de tu presupuesto.

Los muebles pueden ser de diferentes materiales. Para las bases, los más comunes son el aglomerado, los tableros DM y los de madera maciza.

El aglomerado está compuesto por restos de maderas compactadas con resinas o pegamentos. Después se recubre con una lámina decorativa.

Podemos elegir entre muchos colores y texturas, pero el acabado es liso, sin marcos ni molduras. Tiene un precio moderado, que depende de su calidad. Debes asegurarte de que sea resistente al agua o acabará hinchándose.

Los tableros DM, por su parte, están compuestos por fibra de madera prensada de densidad media. El precio es más elevado que el anterior, pero la calidad también. Admiten lacados.

Finalmente, las bases de madera se montan a partir de capas superpuestas muy finas. El precio es más alto; todo depende de la calidad que busques.

Algunos acabados

Si ya te has puesto a elegir materiales para la cocina, habrás oído hablar de ellos a la hora de seleccionar las puertas. El más corriente es la melanina o laminado de baja presión. Se trata de un papel decorativo melamínico que recubre el aglomerado por ambas caras.

El resultado de esta fusión es una superficie libre de poros y con buena resistencia al desgaste. La limpieza es sencilla y el precio, económico.

Ya hemos visto que sólo se producen superficies lisas. Pero no debe preocuparnos, porque es un diseño de plena tendencia.

Otro acabado muy de moda es el estratificado o laminado de alta presión. En este caso, el aglomerado se cubre con una lámina de varias capas de papel impregnado. Es resistente a la humedad y a los arañazos.

La marca más conocida es Formica, que se emplea como genérico para referirse a este material. De nuevo, sólo es válido para superficies lisas; sin embargo hay brillo o mate.

Laminados lacados y polilaminados

Como hemos visto, los tableros de fibra van lacados. Se recubren primero con un laminado melamínico y después llevan un lacado con secado ultravioleta.

De esta forma se obtiene un panel decorativo de alta resistencia, en alto brillo, mate o con textura. Apto para frentes modernos y minimalistas, y para estilos más clásicos.

La resistencia es superior a la del ejemplo anterior. Otra ventaja es que se pueden elegir diseños lisos o de fantasía, aunque cada proveedor tiene los suyos.

La introducción de nuevos laminados, realmente atractivos, ha dejado de lado el polilaminado. En este caso nos encontramos con puerta recubiertas de vinilo aplicado con calor. Éste se adapta a distintas formas y relieves, incluidos los cantos. Y existen tonos lisos e imitaciones de madera.

El color, para el final

Deja los colores y detalles para el final. Céntrate en el proyecto –la mayoría de proveedores te hacen un primer diseño sin cargo- y calidades. Ambos serán determinantes para el presupuesto.

Cuando te decidas, podrás elegir el aspecto externo de los frentes. Una vez seleccionada la serie, en la mayoría de marcas no hay diferencia de precio entre un tono u otro. También puedes elegir el tipo de tirador y color de la encimera.

Si empiezas por el color, te perderás entre tanta gama y no prestarás atención a lo importante: la resistencia y calidad de los materiales. Y la organización de las zonas de actividad.